Los incendios forestales pueden ser causados en forma natural, accidental o intencional y puede acabar con la biodiversidad en ecosistemas dependiendo del grado en que se afecte el área. 
Generalmente, los incendios ocasionados por los humanos son debido a descuidos, como la quema de basura que no se supervisa y no se puede controlar. O también están los vidrios rotos, que actúan como lupas sobre la hierba seca y provoca que se incendien y se disperse debido al viento y a la falta de humedad.
Las principales causas de incendio de forma natural son:
- Calor y baja humedad, fuerte sequía.
- Caída de rayos o erupciones volcánicas.
Los incendios pueden prevenirse con algunas de las siguientes recomendaciones:
- No arrojar cerillos o cigarros encendidos en carreteras y menos, en bosques.
- No hacer fogatas
- Acampar en claros, sin vegetación
- No tirar basura, botellas o vidrios
- Al usar fuego para limpiar terrenos, hacer un hueco para que no se propague.
Al ver un incendio, es importante llamar a emergencias y caminar en sentido contrario al viento para ponerse a salvo.