¿Cuánta sal consumimos?

La OMS recomienda un consumo diario de sodio de 2 g/día, es decir, 5 g/día de sal (una cucharada). Esta cantidad es la saludable y fue necesario hacer estas limitaciones debido a la cantidad de personas con enfermedades cardiovasculares en el mundo.

En el año 2017 hubieron 17.8 millones muertes debido a enfermedades cardiovasculares, lo cual, representa un 32% de todas las muertes registradas en el mundo. La reducción en el consumo de sodio afecta positivamente en la tensión arterial de los adultos, es decir, al reducirse la tensión arterial, se reduce el factor de riesgo de los ataques cardiacos y de los accidentes cerebrovasculares.

El sodio no sólo está presente en la sal de mesa, sino también en una gran variedad de alimentos como el huevo, la leche, la carne o mariscos. Y en productos procesados, el sodio se presenta en mayor cantidad.

Hay una fácil operación que ayuda a estar al pendiente de la cantidad de sal que consumimos y saber la cantidad que tiene un producto:

Mg Sodio/ 1000 x 2.5= Sal
Si el resultado fue:
<10 mg= Bajo en sodio

10-99mg = Moderado en sodio

>10 mg= Alto en sodio

Sazonar alimentos

Los condimentos son los ingredientes que adhieren color, sabor y sazón a nuestra comida y existen muchas opciones naturales que se pueden utilizar para cocinar saludablemente.

  • Picante: es un antiinflamatorio.
  • Ajo: refuerza el sistema inmunológico
  • Pimienta: mejora la digestión y la calidad de piel
  • Sal de mar: alto contenido en minerales.
  • Hierbas: como el cilantro, perejil, albahaca, laurel, comino, romero, entre otros. Contiene vitaminas y minerales.
  • Jugo de limón: sustituto para el vinagre y la sal.

Es recomendable evitar sazonar con grandes cantidades de sal y con cubos o polvos sazonadores, ya que contienen conservadores, colores artificiales, sal yodada y glutamato mono sódico, todos éstos son compuestos químicos que no aportan ningún nutriente a nuestro cuerpo, pero si puede producir reacciones.

Algunos tips que evitan que agreguemos sal excesivamente a nuestros alimentos son:

  • Añadir sal a la comida cuando ésta esté terminada, no en la preparación.
  • Sustituir la sal por otro condimento cuando sea posible.
  • Elegir alimentos con menor contenido de sal.