Beneficios de la sandía

La sandía es una de las frutas ideales para la temporada de verano, debido a que no sólo contiene una gran cantidad de agua, sino que, además, cuenta con una gran cantidad de nutrientes y proporciona muchas vitaminas, minerales y antioxidantes. Hay diferentes tipos de sandía de acuerdo a la región en la que te encuentres, pero todas son altamente saludables. A continuación, te describimos los beneficios que trae el consumo constante de sandía para la salud:

  1. Una de las principales es la hidratación que nos brinda, ya que el 92% de su composición es agua.
  2. Esta fruta es rica en vitamina C, por lo que ayuda a proteger el sistema inmunológico.
  3. La sandía actúa como diurético natural y ayuda al proceso de eliminación de amoniaco del hígado.
  4. Contiene propiedades antioxidantes que protege las células del cuerpo, debido a su alto contenido en carotenoides como el licopeno.
  5. Ayuda a la eliminación de toxinas brindado un efecto depurativo al organismo.

Propiedades nutricionales por cada 100g de Sandía:

Calorías 30

Grasa 0.3g

Proteína 0.6g

Carbohidratos 6g

Fibra 0.4g

Vitamina C 12mg

Vitamina E 0.2mg

Sazonar alimentos

Los condimentos son los ingredientes que adhieren color, sabor y sazón a nuestra comida y existen muchas opciones naturales que se pueden utilizar para cocinar saludablemente.

  • Picante: es un antiinflamatorio.
  • Ajo: refuerza el sistema inmunológico
  • Pimienta: mejora la digestión y la calidad de piel
  • Sal de mar: alto contenido en minerales.
  • Hierbas: como el cilantro, perejil, albahaca, laurel, comino, romero, entre otros. Contiene vitaminas y minerales.
  • Jugo de limón: sustituto para el vinagre y la sal.

Es recomendable evitar sazonar con grandes cantidades de sal y con cubos o polvos sazonadores, ya que contienen conservadores, colores artificiales, sal yodada y glutamato mono sódico, todos éstos son compuestos químicos que no aportan ningún nutriente a nuestro cuerpo, pero si puede producir reacciones.

Algunos tips que evitan que agreguemos sal excesivamente a nuestros alimentos son:

  • Añadir sal a la comida cuando ésta esté terminada, no en la preparación.
  • Sustituir la sal por otro condimento cuando sea posible.
  • Elegir alimentos con menor contenido de sal.